One Hit Wonders (90's) - Parte 1

Anteriormente ya habíamos entregado una pequeña colección de los One Hit Wonders de los 80's (parte 1 y parte 2), ahora continuamos con una primera entrega de los One Hit Wonder de los 90's.

Recordemos que los artistas que mencionamos en estas listas son considerados one hit wonders debido a que produjeron un único tema que puede ser considerado un éxito (un hit) mundial. Muchos de ellos simplemente desaparecieron luego de dicho éxito o no pudieron volver a igualarlo.

En todo caso sirva la presente lista como un breve homenaje a lo que nos dejaron. Empezamos entonces.

Cuando se pierde la inocencia

Gene Kelly y Jerry, cuando los tiempos eran más inocentes.

En Levando anclas (Anchors Aweigh, 1945), el musical de George Sidney, hay una escena que siempre me llenará de alegría. Gene Kelly era el marinero Joseph Brady y en una de las secuencias se encuentra con Jerry (sí, el famoso ratón de la Metro-Goldwyn-Mayer que recrearon William Hanna y Joseph Barbera). Eran los años cuarenta, pero la habilidad de Gene Kelly nos regaló una impecable danza con el simpático ratón animado.

Pasaron muchos años y un día, de pura casualidad, vi un episodio de Family Guy (capítulo 9 de la quinta temporada). Allí, Stewie aparecía con Gene Kelly, en la misma secuencia, bailando en lugar del pobre Jerry. Sé que la escena puede ser divertida para muchos y que Seth MacFarlane, creador de la serie, apela a innumerables elementos de la cultura norteamericana, entre ellos el cine, para recrear con sus personajes una serie de iconos populares.

Stewie en una versión moderna.

Sin embargo, aunque ver a Stewie bailando por un momento me generó una leve sonrisa (más melancólica que otra cosa) me hizo reflexionar sobre la gran diferencia de ver la escena original, parte de un inocente y alegre musical, y descubrirla alterada en una serie más bien de humor corrosivo, a veces casi visceral y ofensivo. No es mi deseo enfrentarme con los millones de fans de Seth MacFarlane, pues reconozco que me he reído con algunos de los capítulos de Family Guy que de casualidad he llegado a ver (con algunos), ni desmerecer el talento de su creador o el valor de la serie en sí misma. Tampoco puedo desconocer el trabajo y la habilidad técnica para reemplazar la imagen de Jerry con la de Stewie. Es más, alguien me podrá decir que gracias a ese capítulo de Family Guy cientos de miles de televidentes vieron por primera vez esa escena e incluso a Gene Kelly.

El candor de la escena original frente al humor ácido de hoy.

Pero me queda la nostalgia de intuir que muchas cosas las conocemos a medias y solo adecuadas al mundo en que vivimos. Tal vez hoy sea el mundo de los seguidores de Stewie, y no de los niños que alguna vez vieron a Jerry (que por cierto pasó por varios cambios y algunos no fueron muy buenos).

Aquí dejamos el video original en un homenaje a tiempos tal vez más inocentes. No sé si mejores, pero en los que aún existía algo de candor. El video con Stewie también se puede hallar en Internet, pero su imagen e incluso su voz (en contraste con la original de Jerry) tienen, para nuestra humilde opinión, algo que desentona con la escena. Algo de duro y grotesco.

Ironías de la vida (o de la tecnología), en el video de Stewie con Gene Kelly, si lo buscan, podrán ver en el reflejo del piso la imagen de Jerry. Como un fantasma silencioso pero presente en una escena en la que, en estos tiempos modernos, él ya no tiene lugar.

El misterio de esas bellas miradas

Elizabeth Taylor: insondable y misteriosa. 

Recuerdo las tardes en que mi abuela veía aquellas películas en blanco y negro frente al antiguo televisor. Aquellos dramas de heroínas intensas y misteriosas que de niño solo comprendía a través de su expresión, de su risa y tristeza, de su angustia y emoción .

En aquellos clásicos siempre había una bella heroína; perfecta, frágil, decidida, arrebatadora, tímida, seductora, inocente, enamorada, despechada, ansiosa por hallar la felicidad o condenada a perderla. Y aunque pequeño, me era difícil no quedar cautivado ante ellas. De alguna extraña forma descubría una verdad inexplicable en cada una de esas bellas mujeres.

Deborah Kerr y en todo su esplendor.

El tiempo pasó, la vieja tele quedó en el olvido junto con los momentos maravillosos que compartí con mi abuela a través de aquellas cintas. Con los años supe quiénes eran esas damas que habían hechizado mi inocente atención. Pude ver otras películas, recordar sus nombres y quedar embelesado con aquellos gestos perfectos, con aquellos ademanes que parecían una extensión de su cautivador embrujo.

Las vicisitudes de la juventud y la adolescencia me hicieron ir de un traspié a otro. Luego llegó la adultez y no había tiempo para esos instantes mágicos de mi niñez. Pero a veces descubría un gesto, una mirada en alguien que acicateaba mis recuerdos.

Hasta que un día supe el porqué de mis nostalgias pasadas. Aquellas actrices eran para mí la ilusión y la fantasía que solo se vive en el arte, en la literatura, en el ideal que construimos cuando el mundo, la rutina, esta vida, no resulta tan bella como habíamos imaginados de pequeños.

Ya no existe aquel sillón rocambolesco en el que mi abuela se sentaba ni el televisor inmenso que no podía rodear con mis brazos. Pero retorna aquel mágico instante, inocente e ingenuo, en que un pequeño niño, sin entenderlo ni saberlo, descubría la más bella de las verdades en el misterio brujo de aquellas miradas insondables. El amor tiene nombre de mujer.

En el video aparecen: Elizabeth Taylor, Ann Margaret, Audrey Hepburn, Diana Rigg, Jane Fonda, Jinx Falkenburg, Marilyn Monroe, Ava Gardner, Catherine Deneuve, Gene Tierney, Rita Hayworth, Katharine Hepburn, Vivien Leigh, Deborah Kerr, Grace Kelly, Ingrid Bergman, Jeanne Moreau, Sophia Loren y Natali Wood.

Una nueva serie para Wonder Woman

Warner Bros vuelve a la carga y junto con la cadena CW anunció una nueva serie de la Mujer Maravilla. CW es la misma que tuvo a su cargo Smallville (2001-2011) y la que estrenará la serie Arrow (basada en Flecha Verde) en octubre de este año. 

La apuesta es replicar el éxito de Smallville: la serie se centrará en una joven Wonder Woman cuando aún no es una superhéroe. La historia estará a cargo de Allan Heinber, quien dio vida a los Young Avengers (Jóvenes Vengadores) para la Marvel y que también recibió el encargo de la DC Comics de escribir una historia para Justice League y un proyecto de Wonder Woman que no logró finalizar.

Adrianne Palicki en una seria cancelada.

Pero eso no es todo, y aquí más de un fanático empezará a dudar: Heinber ha logrado el éxito al estar involucrado en los guiones o la producción de series más bien orientadas al público femenino como Grey’s Anatomy, Gilmore Girls y Sex and the City; aunque también ha realizado otras como Party of Five y The O.C. Es obvio que su elección va tanto por estar familiarizado con el universo de los cómics como por las series que ha tenido a su cargo. Guste o no a los fans, lo cierto es que han elegido a un escritor habituado a tener personajes femeninos como heroínas. Abundará imaginamos el drama, el humor y los diálogos edulcorados si se toma en cuenta su estilo.

Mientras esperamos para ver el resultado de este nuevo intento de Warner, dejamos un video con partes de lo que fue el piloto de la serie Wonder Woman (2011), escrita por David E. Kelley (Harry's Law, Boston Legal, The Practice, Ally McBeal) y que la NBC enterró sin siquiera ponerlo al aire. 

¿Las razones? Se dice que fueron las críticas sobre lo insustancial de la historia, lo malo del guion, los diálogos simples, lo limitado de las actuaciones y lo plano de los personajes. Pero si hacemos memoria, la NBC no tuvo problemas en dar visto bueno a La mujer biónica (Bionic Woman, 2007), The Cape (2011) y Knight Rider (2008-2009) por dar algunos ejempos. Las dos primeras duraron apenas una temporada y a Knight Rider le dieron dos. No es tampoco que las series actuales sean un dechado de virtudes.

La NBC temió duras críticas y dijo no.

Es probable que el interés de los fans y de los medios ante el personaje, sobre todo en esta época en que los superhéroes están de moda, generó una expectativa demasiado grande para lo que en realidad apuntaba la cadena: una serie sin mayores ambiciones y dirigida más bien a los espectadores jóvenes. 

Tamaña atención generó críticas desde la elección de la actriz principal (Adrianne Palicki) y la villana (Elizabeth Hurley) hasta el famoso traje inicial que se iba a usar. La NBC sabía lo que tenía y prefirió evitar el previsible cargamontón. Los más tristes con la prematura cancelación fueron los seguidores de Adrianne Palicki (Legion), y es que le quedaba bien poner cara de mala (o de justiciera si lo prefieren). 

El mal gusto de Adam Sandler

Sandler en una comedia para adultos que raya en lo vulgar.

¿Qué era lo mejor de Adam Sandler? Tal vez su actitud desenfadada y su capacidad para generar simpatía cuando no apelaba al chiste burdo y simplón. Nos regaló cintas como Billy Madison (1995), Happy Gilmore (1996), The Wedding Singer (1998) y The Waterboy (1998) que sin ser gran cosa cumplían su misión: divertirnos sin mayores complicaciones. 

También debemos agradecerle el gusto por incluir en sus cintas actores de la vieja guardia como Henry Winkler (el recordado Fonzi de Happy Days), lo que en algunos casos ha sido la única razón para soportar películas como Click (2006), donde aparecen Henry Winkler y Christopher Walken.

Es cierto que ha logrado sortear el tiempo con comedias como Big Daddy (1999), 50 First Dates (2004) con Drew Barrymore, Anger Management (2003) con Jack Nicholson y The Longest Yard (2005) con Burt Reynolds. Pero ha sido en gran parte a guiones con algo de tino o a que los personajes que interpretaba le exigían cierta moderación. Y decimos cierta, porque siempre apela a alguno de sus ya conocidos chistes que limitan con lo vulgar o lo desagradable (algo que por lo general es de gusto de la platea adolescente).

Dúo sin brillo. Sandler y Samberg en disforzada actitud.  

No vimos Jack and Jill  (2011), una de sus cintas más vapuleadas por la crítica y de pobre respuesta en taquilla, pero nos encontramos con That's My Boy (2012). ¿Qué podemos decir? Que aquí lo hallamos en su versión de parrandero y revoltoso (una de sus tantas variantes) y que repite todas las bromas y clichés vistos en sus otras comedias. También incluye la habitual cuota sentimental y apela a la aparición de cantantes y actores ochenteros (Vanilla Ice y Todd Bridges, respectivamente) o artistas de viejo cuño (Susan Sarandon y James Caan). Un recurso (el de los viejos artistas) que le resulta, pues estos generan de inmediato la simpatía de los espectadores que los reconocen. Y no falta la clásica selección de música y referencias de los ochenta, pero como otras veces, todo es decorativo y  superficial. Lo diferente (o lo peor) es que esta vez le da por las obscenidades, los desnudos gratuitos e incluso por lo grotesco en mayor grado. 

Por si has perdido el romanticismo

Fred y Ginger. Cuando el romance era perfecto. 

Somos producto de nuestro entorno, nos guste o no, parte de nuestros conocimientos y actitudes nos vienen y van de los medios. Los estándares, los modelos a seguir, las formas de entender la vida, lo que anhelamos y lo que entendemos por felicidad. 

La rutina y el diario vivir nos convierten a veces en una sombra de lo que pudimos ser o de lo que deseamos ser. Para nosotros y para nuestros seres amados.

¿A qué viene todo esto? A que hace poco le comenté a mi buen amigo Blue Citizen que para musicales había tenido suficiente con Chicago (2002) y Hairspray (2007), por no mencionar otras cintas en donde abundan  jóvenes de pasarela y actitud rebelde que en general no me dejaban nada. 

El tiempo pasa y uno olvida. Pero, por suerte, la tecnología, que a veces nos deshumaniza, también nos puede devolver mejores recuerdos. Y tal vez este video te pueda regresar a tiempos mejores.

Depende de cómo lo veas. Por mi parte, desearía bailar con ella así como Fred Astaire lo hace con Ginger Rogers. ¿Qué más bella forma de decirle cuánto la amas?

Por cierto, la película es Swing Time (1936). 

Kick-Ass 2, Ninja Turtles y Iron Sky

Héroes verdes y mutantes, justicieros sin poderes y una película de ciencia-ficción cuyo mayor mérito fue el interés que generó para conseguir recursos a través de Internet. De todo para todos los gustos. 

Las Tortugas Ninja en versión animada y de origen espacial.

Vuelven las tortugas. Ya es sabido que las Tortugas Ninja volverán en el 2014 como una cinta animada (Ninja Turtles). El asunto es que Paramount Pictures se ha asociado con Platinum Dunes, que pertenece a Michael Bay, lo que ha generado muchas dudas. Se sabe que ahora las famosas tortugas serán alienígenas y llegarán a la tierra para luchar contra otros seres del espacio (¿les parece familiar?). 
Peor aun, se filtró un primer guion en el que el protagonismo lo tiene Casey Jones (¿lo recuerdan?, el tipo con la máscara de hockey), que en este caso es novio de April O'Neil, y ambos son aún adolescentes. Dicen que el guion es un cúmulo de clichés y frases hechas (¿les parece aun más familiar?). Michael Bay ha señalado que dicho guion es historia pasada. En realidad no es una cinta que nos llame la atención (nos quedamos, sin ser gran cosa, con las películas de inicios de los noventa), pero es claro que nadie le tiene fe a nada que tenga que ver con Bay. El director es Jonathan Liebesman ( Battle Los Angeles, 2011).

El cómic funciona, la cinta está en veremos.

Jim Carrey de justiciero. Confirmado Kick-Ass 2: Balls to the Wall (2013), ahora también se sabe que Jim Carrey estará en la cinta. El actor interpretará al Coronel Stars, uno de los líderes de un grupo de vigilantes llamado Justicia por siempre (Justice Forever). Dado que Carrey ha salido airoso en algunos dramas, podemos esperar que cumpla con el rol sin hacer payasadas fuera de lugar. 

El elenco original también volverá al ruedo y al menos el cómic da para una buena cinta, aunque hay rumores de que el guion será algo diferente para tener una historia más comercial y atraer a más público juvenil. Esperemos que no metan la pata.

Curiosa cinta finesa con un gran pegada en las redes y la web.

Nazis espaciales. Iron Sky (2012) es una película con pocas posibilidades de llegar a nuestras salas. Empecemos por decir que es finlandesa y que las críticas no le fueron favorables. Claro, lo ideal sería poder verla para sacar  conclusiones propias
¿Lo rescatable? Recoge esa leyenda moderna de que los alemanes llegaron a la luna tras la caída del Tercer Reich a bordo de sus naves espaciales (los famosos Haunebu) y trata de plasmarse en una especie de sátira con elementos de ciencia-ficción. Además, los creadores de la cinta lograron reunir más del 10% del dinero que requerían solo con aportes de fans tras anunciarla y promocionarla con pequeños adelantos de la misma en una página web dedicada (www.ironsky.net/site/), entre otros recursos. Lo que dice mucho de lo poderoso que puede ser Internet, si se sabe usar, para dar vida a proyectos sin el apoyo inicial de grandes capitales. Dejamos el tráiler.

El mundo de Don Camilo

Don Camilo (1952) en la versión de Julien Duvivier.

“Mi mundo pequeño” le decía Giuseppe Guareschi (1908-1968) a aquel pueblo que recreó a orillas del Po para alegría de quienes hemos conocido a Don Camilo, Peppone, El Flaco, el Pardo, el Brusco y todos aquellos entrañables personajes llenos de ternura, pero también de furia, de dolor, de rabia y de una forma primitiva pero también más sana de vivir.
Guareschi supo plasmar los avatares de aquella Italia de la posguerra, los vaivenes terribles de la política y de cómo al final la vida se reduce, al menos en aquel pequeño mundo idealizado, a sacarle lo necio al prójimo con una recia trompada sin que por ello se le dejase de respetar.

Aún sobreviven aquellas historias en antiguas ediciones como las de Oveja Negra. Así que, en caso te encuentres con esta pequeña colección de relatos, toma el libro sin dudar. Son historias cortas, hilarantes, ocurrentes, sentimentales y con verdades tan simples que solo pueden hallarse en un libro como este. El mejor es el que se titula Don Camilo a secas, pues en las siguientes andanzas del buen cura, Guareschi pierde algo del encanto duro y sincero del original.

El Don Camilo (1984) de Terrence Hill .

Hay una película de Terence Hill (Don Camillo, 1984) que hace una versión libre (y bastante injusta) de aquel libro; y también una versión más fiel de Julien Duvivier realizada en los cincuenta. Aunque me quedo con el Don Camilo que imaginé en aquellas horas de total felicidad, de risas y carcajadas, de conmovedoras verdades y del deseo de ser “grande como una torre y con manos tremendas como palas” para impartir justicia como lo hacía aquel héroe de sotana, aunque luego El Cristo de la iglesia lo reprendiese.

El valiente Guareschi. 

Periodista, escritor y dibujante, Guareschi era tan valiente como Don Camilo y decir la verdad le valió ser detenido y encarcelado en varias ocasiones. Viejo lobo sabio, conocía la ponzoña de las ideologías absurdas y por ello se dio tiempo para señalar que el Cristo del que hablaba, que el Don Camilo que describía y que el Peppone y compañía que siempre tenían algo entre manos eran de su inspiración; que el Cristo no representaba al de la Iglesia, ni Don Camilo a los curas ni  Peppone a los políticos de ningún lado. Era su mundo pequeño, ideal y en el fondo inocente, y por eso, mucho mejor que el de verdad. 

Don Camilo es un libro recomendable para descubrirlo y releerlo una y otra vez. 

“Bravo, Don Camilo”, diría el  Cristo del altar. Y Peppone, a regañadientes, estaría de acuerdo.

Hansel y Gretel superhéroes

Hansel y Gretel en una versión para estos acelerados tiempos.

Si los mitos griegos no son suficientes o los remakes no dan resultados, siempre se puede buscar en algún clásico de la literatura y darle una vuelta de tuerca. 

En Hansel and Gretel: Witch Hunters (2013) esta vez se trata de aprovechar uno de los cuentos escritos por los hermanos Grimm y usar toda la parafernalia y tecnología que se tiene a la mano. 

Es claro que el asunto es sacar personajes de donde sea para asegurarse a un público siempre deseoso de repetir sensaciones. Total, mejor ir a lo seguro.

Así, el director Tommy Wirkola (Zombis nazis) recibió el encargo de dirigir esta película que toma a Hansel y Gretel y los convierte en cazadores de brujas y demás seres malvados en una suerte de cinta que combina lo visto en Van Helsing (2004), Clash of the Titans (2010), Abraham Lincoln, cazador de vampiros (2012) y paremos de contar.

Jeremy Renner (The Bourne Legacy, The Avengers) y Gemma Arterton (Clash of the Titans) tienen los papeles centrales y seguro el resto será un cúmulo de lugares comunes. Pero esperemos que al menos sea entretenida; al fin y al cabo, Renner ha interpretado a un superhéroe (Hawkeye) y Artenton a una diosa (Io). Así que la actitud la tienen. Pensar que Terry Gilliam tuvo una idea algo más ambiciosa con The Brothers Grimm (2005), pero el resultado fue un desastre. Es más, parece que en esta nueva cinta solo voltearon un poco la idea y le añadieron mucha más acción. La película se estrena en enero del 2013, pero el tráiler ya está aquí.

Ellas también sabían tocar

Tentadora. Cherie Currie en la plenitud adolescente. 

Podrán decir que fue un capricho adolescente, una chirriante versión de aquellos setenta desenfrenados. Que solo en giras por Europa (adoradora de lolitas pop como Lio y Alizée) y Japón (siempre tan curioso en sus gustos) lograron el éxito, mientras que en Norteamérica no se les tomó del todo en serio a pesar de subirse a la ola punk y ser teloneras de Cheap Trick, Tom Petty y The Ramones. Tal vez porque siempre había algo de escozor cuando Cherie Currie movía las demasiado jóvenes caderas.

The Runaways  es este tipo de curiosidad que sobrevive gracias a la tecnología actual. Alguien se acuerda del grupo, otro ve que tenía potencial comercial y luego, para dar forma a la idea, se hace la película (The Runaways, 2010) que terminará por cerrar el círculo y llevarlas otra vez al olvido.

Joan Jett y Lita Ford sobrevivieron al estridente grupo.

Pero Cherie Currie (vocalista), Joan Jett (guitarra), Lita Ford (guitarra), Jackie Fox (bajo) y Sandy West (batería), en toda aquella superficialidad de réplica y pose, algo de naturalidad tuvieron. 

En todo caso, ellas cantaban y tocaban. Y eso ya es un mérito con tanto artista prefabricado. Claro, ellas a su manera también lo fueron; pero respiraban, comían y bebían algo de verdad: la música. En su estilo, pero lo hacían. Y solo tenían en promedio 17 años. 

El grupo cambió de integrantes un par de ocasiones, incluso desde sus inicios, y tras cuatro años se disolvió. Lita Ford y sobre todo Joan Jett demostraron que tenían más que dar.  Cherie desapareció cuando tras esa imagen adolescente y rebelde descubrió que  no había nada.

Con ustedes, The Runaways.

Los 24 Golpes de Mikel Erentxun

El de siempre, pero diferente. 24 Golpes (2011).  

En nuestra humilde opinión, lo mejor de Mikel Erentxun se dio en Piedras (1994). Es cierto, estamos hablando de un trabajo en conjunto con Diego Vasallo. Tal vez aquel disco no tenía las complejas letras de producciones anteriores ni la energía desbocada de la juventud, pero a cambio lució libre de un desenfreno que les permitió elegir la frase equilibrada y la melodía exacta. Juntos (Erentxun y Vasallo) limaron sus flaquezas y lucieron virtudes que brillaron aun más por el contraste entre ambos.

Juntos alcanzaron el equilibrio perfecto aquella vez. Mikel Erentxun fue preciso en sus letras y se alejó de algunos lugares comunes que lució después en sus producciones como solista; mientras Diego Vasallo se liberó de una tristeza que podía ser quejumbrosa y demasiado oscura.

Tras el final del grupo, los primeros discos como solistas de ambos fueron logradas entregas, pues aplicaron al máximo –libre uno del otro– todo su estilo sin pudor ni limitaciones. Así que el resultado, entre sumas y restas, fue bueno. El problema es que luego se volvieron repetitivos, algo que se notaba más en Erentxun, aun cuando siempre lograba ofrecer canciones por encima del nivel promedio (musicalmente hablando al menos, en que bebía y copiaba a sus fuentes desde Morrisey, The Beatles y David Bowie).

Piedras (1994), tal vez lo mejor de Erentxun y Vasallo.

Naufragios (1992) fue interesante y lleno de energía; El abrazo del erizo (1995) un intento por canciones más elaboradas aunque igual de intensas; Acróbatas (1998) un poco más de lo mismo aunque ya mostraba cierta mirada hacia atrás. 

De allí en adelante lo escuchamos de lejos en la siguiente década. Y así el buen Erentxun lanzó melodías que cumplían, que sonaban rockeras, otras más tiradas al pop, siempre con el amor de una u otra manera en el centro de todo (Detalle del miedo, 2010). En ocasiones nos agotaba su eterna juventud, aun en sus canciones más reflexivas. Sonaba al de El abrazo del erizo, a veces más acelerado, a veces con menos revoluciones. Nos dejaba pensando que estaba bien, que era el de siempre; pero nosotros, quienes crecimos con él, ya no lo éramos.

Y un día escuchamos, algo tarde, 24 Golpes (2011). Es él, el mismo, con letras a veces casi geniales, otras demasiado almibaradas, con los amores y desamores siempre allí. Pero aquí nos reencontramos con el viejo amigo desde Por tierras escocesas (1985), Autobiografía (1989) y Supernova (1991); solo que ahora él también se mira al espejo, y es claro que el tiempo ha pasado. Y para bien.

El tiempo pasa: Mikel Erentxun, Juan Ramón Viles y Diego Vasallo.

En 24 Golpes no todas las canciones nos convencen, a veces alguna parece que se le va de las manos (nos referimos  a la letra). Muchas suenan al Erentxun de antes, quizás al de Piedras y más atrás. En los acordes, en los ritmos, en las letras largas y sentidas. Pero algo ha cambiado. 

Desde el timbre de su voz, que curiosamente nos recuerda a Diego Vasallo, hasta los silencios, las pausas donde antes había estribillos y guitarras intensas. Es un sonido más seco, más roquero en algunas canciones; incluso se siente más maduro allí donde regresa a ser el de El abrazo del erizo (como en Ropa Vacía) . En realidad, para quienes lo escuchamos de tiempo es, como decimos, el de siempre, pero esta vez nos llega a tocar, como cuando de jóvenes podíamos hallar en sus letras la intensidad que deseábamos vivir.

Esta vez el roquero se sobrepone al artista pop y está de regreso, como nosotros, luego de haber andado entre piedras, bajo nubes negras, con cielos del color de las hormigas. El amor en la juventud es intenso y maravilloso, como la vida; el amor de la madurez es el momento perfecto, “un imborrable presente... donde todo lo que se ama sigue igual (24 Golpes, Intacto)". 

El Hobbit, Ratner, Shield y Batman

Parece que los estudios nos tendrán entretenidos con más de un anuncio. Lo mejor, a nuestro gusto, es conocer las fechas de salida para la versión animada del cómic de Frank Miller: Batman: The Dark Knight Returns (1986).   

   

Igual que Bilbo. Solo queda esperar.

Siempre El Hobbit. Se definió la fecha de la tercera parte de El Hobbit. El 14 de diciembre llega The Hobbit: An Unexpected Journey; la segunda entrega cambió de nombre, ahora será The Hobbit: The Desolation of Smaug y se estrenará el 13 de diciembre del 2013. Sucede que hicieron un cambio con el título original de la segunda película, que ahora pasó a ser el de la última parte, The Hobbit: There and Back Again, a estrenarse el 18 de julio del 2014. Warner decidió que la última cinta salga “solo” siete meses después de la segunda. Vaya, qué generosos.

Ahora será Ratner. Para los hinchas de La Liga de la Justicia: tras mencionarse a Ben Affleck (The town) y luego a los hermanos Wachowski (Matrix), ahora se baraja el nombre de Brett Ratner (Rush Hour); sí, el mismo que dirigió  X-Men: The Last Stand (2006). Es cierto que no lo hizo mal en Red Dragon (2002), pero lo de la saga de X-Men es para el olvido. El argumento de Warner es que están en busca de un director “que entienda el mundo de los comics y que sepa manejar argumentos con varios personajes”. Y la cosa puede ir en serio, pues Ratner fue uno de los voceados para hacerse cargo de Superman Returns (2006).

Shield en la tele. Joss Whedon (The Avengers) se hará cargo de una serie basada en S.H.I.E.L.D. para la ABC. Whedon escribirá el guion y dirigirá el primer capítulo. Hasta el momento es todo lo que se sabe. No está confirmado el personaje de Nick Fury ni si acaso Samuel L. Jackson podrá aparecer al menos al inicio.

El regreso de Batman. Basada en una de las mejores historias creadas por Frank Miller en los ochenta, Warner anunció el lanzamiento de la cinta animada Batman: The Dark Knight Returns.

Como para no dejar la costumbre, la película estará dividida en dos partes. La primera saldrá a la venta el 25 de setiembre en DVD y Blu-ray. Para la segunda parte habrá que esperar hasta inicios del 2013.  Dejamos el tráiler.